Roberto Osvaldo del Valle nació el 24 de septiembre de 1920. Fue educador,
escritor, periodista, ensayista y miembro activo de entidades culturales de la
ciudad, sigue siendo un protagonista de lujo en las historias del quehacer marplatense. Habiendo nacido en la decada del 20, sus
referencias biográficas ya de por si forman un grueso cuadernillo. La vida del
profesor Roberto Osvaldo del Valle Preux -así es su nombre completo- ha sido
intensa, llena de inquietudes y consustanciada con una tarea social y de
servicio hacia los demás de la cual no desvió ni un ápice en sus ochenta y un septiembres.
Roberto del Valle en su adolescencia acompañado de su familia. Su papa Cristobal del Valle. Su mama. Anita Preux y sus hermanos Esther y Hector |
Roberto del Valle en una lectura al público |
Sus
años dedicados a la enseñanza privada y publica, su participación en medios
gráficos, sus aportes desde la secretaria de cultura y educación en los tiempos
de la intendencia de Jorge Lombardo, y la contribución a la historia del pago
chico, fruto de su incansable voluntad de investigar y confrontar datos, eran
algunos de los temas apuntados en el cuestionario abierto de la entrevista. Fue
justamente por esos valores que recibió el premio Lobo de Mar a
la Cultura. Falleció un día 5 de abril de 2002, cuando solo le faltaban cinco meses para llegar a los 82 años de edad.
Recuerdos de un maestro.
A continuación se transcribirá parte de la nota que le fuera realizada para la Revista Toledo con Todos en septiembre del año 1997. (ver Fuentes al final de la nota)
La charla con el profesor era una deuda pendiente de Toledo con Todos desde hacia tiempo. Sus años dedicados a la enseñanza privada y publica, su participación en medios gráficos, sus aportes desde la secretaria de cultura y educación en los tiempos de la intendencia de Jorge Lombardo, y la contribución a la historia del pago chico, fruto de su incansable voluntad de investigar y confrontar datos, eran algunos de los temas apuntados en el cuestionario abierto de la entrevista.
RUFINO INDA Y SU MOMENTO HISTÓRICO. CONTRIBUCIÓN A LA HISTORIA DE MAR DEL PLATA Autor: ROBERTO OSVALDO DEL VALLE PREUX Editorial: Impresora Atlántica Offset Año: 2001 Páginas: 265 |
Sentado
a la cabecera de la mesa del living de su hogar -el lugar todavía muestra
rastros de la fiesta de las bodas de oro que celebraron los dueños de casa-, el
profesor comienza a desplegar varios papeles y fotos que reflejan sus
actividades, un tiempo después que arribara desde Huanguelen, partido de
Coronel Suarez, a estas tierras de arena y sol. Entonces corría el año 1929.
“Tuve la suerte de compartir mis estudios con hombres
y mujeres que luego de los años hicieron mucho por la ciudad. Mi compañero de
banco en el colegio nacional Mariano Moreno fue José Lagrange”, señala del
Valle, quien mantiene la costumbre de reunirse con sus amigos todos los
miércoles a la mañana en una mesa de café.
Tal
vez por herencia paterna, don Roberto fue un apasionado de la lectura primero,
y de la escritura después. Cuando falleció su padre -Cristóbal, el
representante de los productos Bagley en la zona-, tuvo que posponer sus
aspiraciones universitarias como abogado y trabajar para sostener a la familia.
“En ese tiempo entro a la redacción del por entonces
vespertino El Atlántico cuya dirección ejercía Amadeo Courel”, rememora.
Disertación escuela de Periodismo. Charla de Roberto del Valle
video gentileza Historia de la Televisión Marplatense
Luego con la creación del círculo estudiantil marplatense, junto al aporte de José Roque Vilas (padre de Guillermo), Alberto Mutoni, Irma Fernández Danza, Raúl Gonzales, Hebe Como Carmini, Isabel Lai y Santiago Castaño, Roberto del Valle toma un compromiso diferente, más compenetrado con la suerte de la ciudad adoptiva.
“Comenzamos a trabajar en 1939 con el propósito de
movilizar a toda la ciudad en base a inquietudes culturales. Trajimos a Arturo
Capdevila, Pedro Miguel Obligado, el astrónomo Martin Gil, Ciro Torres López, y
otras figuras destacadísimas de las artes ciencias y letras”, completa el
profesor, orgulloso de haber formado parte de ese movimiento. “Muchas veces de
califica a Mar del Plata como una ciudad cartaginesa, donde lo único que
interesa es el comercio; pero tiene títulos y antecedentes de figuras
importantes que han hecho mucho por ella. Muchas veces en esa búsqueda de la identidad
marplatense -el prefiere hablar de la personalidad cultural de la ciudad-, esos
nombres han quedado olvidados”.
Pero
hay un hecho puntual que lo satisface aun mas tal vez porque lo tuvo como
protagonista principal: haber descubierto a una figura estelar de la música.
Así lo cuenta don Roberto:
“Llegue a Buenos Aires junto a Rafael Méjico, un gran concertista de piano, buscando un numero artístico para llevar a Mar del Plata. Teníamos noticias de un jovencito al que catalogaban como virtuoso del violín. Fuimos hasta donde vivía, una casa tipo chorizo, bien modesta. De pronto aparece de la calle un chico de pantalón corto, con los útiles del colegio bajo el brazo. Después de presentarnos le pedimos una demostración de su estilo, para conocerlo mejor. Recuerdo que el padre le dijo “¿por que no tocas el concierto de Paganini…?”. Una vez que se largo, no paro más. Estuvimos hasta la noche escuchándolo y disfrutando de su talento. Corría el año 1945, tenia apenas 11 años y su nombre era Alberto Lisy”.
Para
esto ya había comenzado con su tarea como docente particular, en el instituto
que funcionaba en Moreno 3324. Por esas aulas pasaron centenares de jóvenes
marplatenses, ávidos de conocimientos frescos con los cuales pasar sin
sobresaltos los exámenes de diciembre y marzo.
“Los orientaba en todas las materias, porque en
aquellos años no había mucha gente que enseñara, y los contenidos de las
materias eran mas complejos que los de ahora”, dice orgulloso de haberse
convertido en el tutor y guía de varias generaciones de estudiantes. “No se si
he llegado a transmitir bien mi mensaje. Siempre trate de compartir mis
experiencias y conocimientos. Fue una gran responsabilidad encargarme de esta
tarea y me significo grandes satisfacciones…”.
Pasión con olor a tinta
La
enseñanza también la volcó en otra de sus pasiones: el periodismo. En 1957 fue
uno de los integrantes del directorio de la escuela de periodismo Domingo
Faustino Sarmiento, fundada el 7 de junio de ese año por la asociación de
periodistas de Mar del Plata que el integraba junto a Jorge Lombardo, Victorio
Fagniani, José Pérez, Isaac Souessia y Pedro Morales Viera entre otros. Por
muchos años fue titular de las cátedras de introducción al periodismo e
historia de la civilización.
El profesor Roberto Osvaldo del Valle en un agasajo del Club Mitre |
El
profesor del Valle siempre estuvo atento al sentimiento comunitario y muchas
veces se anticipo en reclamar para la ciudad lo que creía justo y necesario.
Estuvo en el inicio del movimiento Pro fundación de la universidad del Mar, a
fines de la década del cincuenta, redactando el Memorial sobre su creación, el
cual fue elevado al poder ejecutivo nacional “se expusieron -cuenta- los
motivos que justificaban la fundación del establecimiento terciario las
facultades que cubrirían algunos de los requerimientos de la población estudiantil.
Pretendíamos que hubiese una facultad de arquitectura, ingeniería naval,
ciencias económicas, derecho, un museo oceanográfico, escuela superior de artes
plásticas y decorativas, y escuela tecnológica de pesca”.
Y
finalmente en la década del sesenta, la universidad llego a Mar del Plata y
comenzó una etapa clave en la historia de la ciudad.
Ahora
la entrevista recorre distintos caminos. El grabador encendido lo obliga a
continuar con la recuperación de datos como anécdotas y recuerdos de su vida, plasmados
en papel de todos los tamaños que hasta ese momento descansaban en grandes
cajas de cartón.
“Siempre he tenido un sentido prospectivo de la vida.
He tratado de no quedarme anclado en el pasado y estoy siempre pensando en el
mañana”. Así es como del Valle justifica su hiperactividad.
Enumerar
los acontecimientos que lo tuvieron como impulsor o instituciones que
obtuvieron y realizaron gestiones fundamentales para la ciudad -como su labor
en la sociedad Argentina de Escritores SADE, de la que es miembro honorario, o
la casa del Folklore-, siempre sostenidos por el motor de su empuje serviría
para ratificar la riqueza de toda su obra comunitaria.
“Mar del Plata tiene un espíritu joven permanente.
Siempre lo tuvo. El signo del adolescente que marcha en la búsqueda de un
destino, que todavía no ha encontrado el perfil definido”.
Y
tal vez, contagiado por la eterna juventud del paisaje que lo rodea como el
profesor del Valle nunca deja de estudiar, escribir, investigar y propulsar
actividades para y por la ciudad.
Vida y obra
Roberto
Osvaldo del Valle Preux nació en Huanguelen, el 24 de Septiembre de 1920. A los 5 años recibía
clases particulares porque no tenia la edad suficiente para ser admitido en la
única escuela del pueblo, ya en Mar del Plata, en 1929 completa sus estudios
primarios en la escuela n°16 y en la escuela comercial Fernández Danz. La
secundaria la realizo en el colegio nacional Mariano Moreno.
En
el año 1941 comienza a dar clases particulares en el instituto de la calle Moreno
3324. Seis años después contrae enlaces con Elsa Esther García Real, con la que
tiene cuatro hijos: Jorge Roberto, Carlos Enrique, Raúl Osvaldo y Diana Elena. Con
23 años de edad es elegido presidente del Club Mitre, gestión en la que se
adquiere la sede.
Tres años mas tarde funda y dirige la revista literaria Vértice. Al año siguiente es nombrado director de la escuela de periodismo Domingo Faustino Sarmiento y en 1958 dirige los destinos del matutino "La Mañana".
Elsa García y Roberto del Valle. La nena de espaldas es su nieta Macarena del Valle |
A roberto le gustaba sacar fotos, sobretodo de sus nietos.cá con su cámara en el cumpleaños de su nieta, Gabriela del Valle, de Rosa. |
Roberto en la casa del tejado. Atrás Liliana Naveira (su nuera) y Anita Preux (su mamá). A upa, Gabriela del Valle, y Valeria del Valle en cochecito. |
Tres años mas tarde funda y dirige la revista literaria Vértice. Al año siguiente es nombrado director de la escuela de periodismo Domingo Faustino Sarmiento y en 1958 dirige los destinos del matutino "La Mañana".
En
1960 es designado miembro de honor por la fundación de instituciones culturales
y es distinguido como académico de honor por el instituto heráldico de estudios
históricos genealógicos. En 1963 publica "Opinión y Dialogo" y un año después es
designado presidente del directorio del Instituto Municipal de Estudios Superiores.
En
el verano del 76 escribió el guion de la película "Manos Guiadas", destinada a
interesar a la juventud desorientada y ociosa en el aprendizaje de oficios. En
los primeros años de la década del 70 y como presidente de la institución Amigos
del Folklore gestiona y compra la sede de la institución.
Por su constante esfuerzo y trabajo por el bienestar de la ciudad, en 1974 es designado Subsecretario de Cultura y Educación de la Municipalidad de General Pueyrredón; durante su gestión se crea el Polivalente de Arte. En 1978 y 1984 nuevamente preside Amigos del Folklore.
Elsa García, su mujer, Gabriela del Valle, su nieta y Roberto, 1995 |
Por su constante esfuerzo y trabajo por el bienestar de la ciudad, en 1974 es designado Subsecretario de Cultura y Educación de la Municipalidad de General Pueyrredón; durante su gestión se crea el Polivalente de Arte. En 1978 y 1984 nuevamente preside Amigos del Folklore.
Roberto Osvaldo del Valle en sus últimos años |
En
1991 es distinguido con el premio Lobo de Mar, por su actividad cultural. Entre
sus ultimas actividades y reconocimientos destaca la declaración que lo
proclama miembro honorario de la Sociedad Argentina de Escritores, filiar Mar
del Plata y lector n°1 de la biblioteca publica Leopoldo Marechal, del Centro Cultural General Pueyrredón. En el año 1999 fue declarado "Ciudadano Ilustre" de la ciudad de Mar del Plata, en virtud de su valioso aporte en el
campo de la educación y su accionar a favor de la cultura, segun la Ordenanza Nº 12465.
Tambien formo parte de la mesa DOXA "mesa de amistad y opinión" en la que se reunia todos los miercoles junto a una gran cantidad de personas notables y prestigiosas de nuestra ciudad: Julio Del Río, Enrique Marin Vega, el ex intendente Jorge Raul Lombardo, el periodista Roberto J. Colombo, el Arq. Daniel Medina, el profesor Rodolfo H. Danza, el doctor Miguel Scioscia, el Ing. Jorge A. Cavallotti, el Dr. Luis A. de la Torre, el constructor Carlos Ballerio, Daniel Median, el Director de Radiocuminicaciones Carlos Lucitti, el Dr. Juan Carlos Galé, el doctor Antonio Matos Rodriguez, Norberto Villamil, Juan N. Morrell, Vicente Ramon Fernandez, Hector Rovelli, el Dr Raúl Puzzi y el doctor Eduardo E. Dartiguelongue entre otros.
Tambien formo parte de la mesa DOXA "mesa de amistad y opinión" en la que se reunia todos los miercoles junto a una gran cantidad de personas notables y prestigiosas de nuestra ciudad: Julio Del Río, Enrique Marin Vega, el ex intendente Jorge Raul Lombardo, el periodista Roberto J. Colombo, el Arq. Daniel Medina, el profesor Rodolfo H. Danza, el doctor Miguel Scioscia, el Ing. Jorge A. Cavallotti, el Dr. Luis A. de la Torre, el constructor Carlos Ballerio, Daniel Median, el Director de Radiocuminicaciones Carlos Lucitti, el Dr. Juan Carlos Galé, el doctor Antonio Matos Rodriguez, Norberto Villamil, Juan N. Morrell, Vicente Ramon Fernandez, Hector Rovelli, el Dr Raúl Puzzi y el doctor Eduardo E. Dartiguelongue entre otros.
Inauguración del busto de Felix U. Camet por
Roberto del Valle Preux
El día 5 de abril de 2002 fallece en la localidad de Huanguelén perteneciente al partido de Coronel Suárez, en la Provincia de Buenos Aires.
Fuente:
Charlas entre su hija Diana del Valle y Pablo Junco.
Fotografías cedidas por su hija Diana del Valle.
Nota extraida de la Revista
Toledo con Todos
Extraordinaria vida a fuerza de empeño, pasión y sabiduría, que trasmitía su incalculable tesoro de valores a todos los alumnos que recibía en su casa instituto de calle Moreno.
ResponderEliminarSoy una vecina que siendo niña lo admiraba, era muy bondadoso y cuando las circunstancias lo requería era recto y determinante. En el cumpleaños de sus hijos nos deleitaba con golosinas que distribuía desde un pequeño balcón a todos los chicos del barrio.(Cuento una infidencia), cuando tenía a sus alumnos mucho tiempo estudiando en el altillo, les pasábamos sobre un paredón de mi casa, pancitos con carne. Recuerdo a toda su excelente familia y el tiempo que ya pasó, considerando muchas historias de vida alrededor de una buena vecindad que lo admiraba.
No existe en la publicacion referencia alguna, sobre el año e institucion responsable de otorgar el titulo docente, ni tampoco el area para ejercer la enseñanza.
ResponderEliminarFui alumno de el.al igual mi padre.un tipo genial...admirable
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