lunes, 5 de septiembre de 2016

ESCUELA DE ARTES VISUALES MARTÍN A. MALHARRO

Martin A. Malharro


Nace en la ciudad de Azul, el 25 de agosto de 1865. Sus tendencias artísticas se manifiestan a los catorce años cuando rompe con el pasado y la inapelable oposición del padre a su vocación. Viaja a Buenos Aires donde trabaja para ganarse la vida. Cambia su apellido de Mailharro por el de Malharro.  Inicia estudios de dibujo en la Asociación Estímulo de Bellas Artes bajo la dirección de Francisco Romero en 1882. Como medio de vida diseña etiquetas para cigarrillos, tarjetas comerciales, membretes, etc. Realiza viajes a Santa Fe y Córdoba donde pinta paisajes.

En 1890 pasa una larga temporada en la estancia del Dr. José Ramos Mejía, quien interesado en su pintura, lo protege y le procura un ambiente desligado de preocupaciones materiales. Las experiencias realizadas al aire libre frente a la llanura pampeana, preparan el terreno para el contacto con el impresionismo. Hacia 1891 viaja a Tierra del Fuego y Punta Arenas, donde la luz y el ambiente marino lo incitan a cambiar su paleta, y las sombras propias del claroscuro se tiñen de color. Al año siguiente se relaciona con Alfonso Bosco, grabador y litógrafo italiano que lo ayuda a desarrollarse en estas técnicas.
 
Martin A. Malharro

Participa en el Segundo Salón del Ateneo realizado en 1894 con un paisaje titulado Al caer la tarde y con dos marinas: El acorazado Huáscar y el corsario y La Argentina. Esta última obtiene una segunda mención honorífica y es destacada por los diarios capitalinos.  Por intermedio de Roberto J. Payró, que aprecia su obra, conoce a Martiniano Leguizamón con quien traba amistad y ejecuta ilustraciones para el libro Recuerdos de la Tierra, que aparecería al año siguiente. Payró lo conecta con el diario La Nación, donde trabaja como ilustrador, hecho que alivia su situación económica.



Martin A.Malharro en La Plata, en el centro. Año 1907

A pesar del malogrado  intento de obtener una beca para estudiar en Francia,  hacia fines de 1895, Malharro toma una decisión: obtiene un pasaje en un buque de carga y parte hacia París, llevando consigo su piedra litográfica. Se instala en Montmartre y subsiste merced a dibujos, ilustraciones, figurines de modas y bonetería. Poco después se le reúnen su mujer María Luisa Laborit y sus hijos, María Amalia y Martín. Su talante romántico y el naturalismo aprendido en los talleres de Estímulo, concuerdan con la obra de Millet y de los pintores de la Escuela de Barbizón, pero en estos años europeos recibe, principalmente, la influencia del impresionismo; analiza la técnica pictórica, las cualidades de la iluminación, la ambientación y la búsqueda de la naturaleza. 
 
Martin A. Malharro
En 1901 regresa a Buenos Aires después de haber presenciado en 1900 la Exposición Centenaria de París que afianzará el éxito del impresionismo ante el gran público. Esta circunstancia determina su alejamiento del academicismo y poco después, en Auvers-sur-Oise pinta En plena naturaleza y El arado. Al año siguiente, el Salón Witcomb organiza una exposición de sus pinturas realizadas en Francia, algunas de ellas terminadas en Buenos Aires. Sobre el cierre, Joaquín V. González aprueba la adquisición de En plena naturaleza para el Museo Nacional de Bellas Artes. 

La muestra, según José A. García Martínez, “sería uno de los grandes intentos de actualización artística en el país”. Romualdo Brughetti afirma que si “Faustino Brughetti exhibió telas impresionistas un año antes, el mérito de Malharro consiste en haber dado la batalla por ese ideario estético”. Efectivamente, poco después, Malharro comienza a publicar artículos (Diario, Ideas y Figuras, Athinae, Tribuna) y pronunciar conferencias dando a conocer su pensamiento y explicando su obra.
 
Martin A. Malharro
En junio de 1908 presenta su segunda exposición en Witcomb, compuesta por 51 acuarelas y 2 pasteles. En opinión de Ángel Osvaldo Nessi “se advierte un cambio notable: la tendencia a la ilustración se acentúa, la técnica de la acuarela, en mínimas 'pochades' ejecutadas con evidente premura se generaliza, el amaneramiento acecha”. La muestra no obtuvo el éxito de la anterior. Durante este año y el siguiente pinta una serie de nocturnos próximos al simbolismo, tendencia que se manifestará en obras más tempranas como Mis amigos los árboles en la que Jorge López Anaya percibe “no sólo un pronunciado antiacademicismo, sino también el anti-impresionismo que asocia este cuadro con el simbolismo. 
 
Martin A. Malharro

Es suficiente observar los árboles antropomorfizados, su expresión patética, las deformaciones de las masas vegetales que se aplastan contra el fondo y reducen la ilusión espacial y el color azul dominante. Parece que todo recordara la frase de Maeterlink: ‘El símbolo es la alegoría orgánica e interior; toma su raíz en las tinieblas”.

Parvas. Autor: Martin Malharro


A partir de 1904 inicia su tarea docente: ocupará el cargo de Inspector Técnico de Dibujo de la provincia de Buenos Aires, será Director de Cursos Temporarios en el Ministerio de Instrucción Pública, dictará cátedras en la Universidad Nacional de La Plata, en la Escuela Normal de Profesores y en la Escuela Normal de Maestros de Barracas. Esta actividad tendrá como fruto, en 1911, la publicación de su libro El dibujo en la escuela primaria. 

 Huellas Arte argentino Martín Malharro I Canal Encuentro
 
Huellas Arte argentino Martín Malharro II Canal Encuentro

Fallece el 17 de agosto de 1911, cuando estaba preparando una tercera exposición, que a la sazón, sería póstuma y abriría sus puertas en el mes de octubre. Nessi observa que “Malharro asimila del París de fin de siglo una paleta más clara y vibrante, que reverdece su academia; pero también, junto a esa técnica más aireada, aparece una cosmovisión algo híbrida, compromiso entre su formación criolla y los confusos ideales nuevos. Así Malharro, introductor del impresionismo en la Argentina, no será un impresionista ortodoxo: la ruptura del plano plástico mediante toques de color, se conjuga en él con un realismo visual que, en su temperamento algo melancólico, carece del encanto primaveral de un Monet, y que va a reflejarse en obras inspiradas en el crepúsculo y la noche.”

Síntesis cronológica

1865 - Nace el 25 de agosto en Azul
1879 - Viaja A Bs. As.
1882 - Inicia estudios de dibujo en la Asociación Estímulos de Bellas Artes.
1886 - Viaja a Rosario y Córdoba.
1890 - Vive en la estancia del doctor Ramos Mejía
1891 - Viaja a Tierra del Fuego
1895 - Se convierte en colaborador de La Nación
1895 - Viaja a París 1901 - Regresa a Buenos Aires
1904 - Es nombrado Inspector Técnico de Dibujo
1911 - Publica "El dibujo en la escuela primaria"
1911 - Muere el 17 de agosto
1865 - Se le rinde un homenaje en Azul auspiciado por la intendencia, se inaugura un monolito en su honor.

La escuela de artes visuales 
"Martín A. Malharro"

La Escuela de Artes Visuales Martín A. Malharro fue fundada el 4 de junio de 1960 por el profesor Alberto Emilio Torres,  su director hasta 1967. Las clases se iniciaron en el Club Mar del Plata, pero un año más tarde se incendió el edificio y la escuela se trasladó a la casa de Funes 1357. 
 
10 de febrero del 1961 se incendia el lujoso Club Mar del Plata, sede de muchos acontecimientos deportivos, culturales y sociales. Imagen gentileza de Edith Lilia Bello de Fares Taie.

El nombre “Martín A. Malharro” (artista y pintor de la provincia de Buenos Aires) fue solicitado por la dirección en 1964 y aprobado por la superioridad. Esta designación es utilizada al año siguiente. La revista "Domingo" del 26 de diciembre de 1965 publica el siguiente artículo:
“Emocionada evocación del profesor Malharro, en Artes Visuales, al inaugurar la exposición anual de la labor de sus alumnos, la Escuela de Artes Visuales descubrió en su sede un busto del profesor Martín A. Malharro de quien lleva el nombre la casa de estudios”
Antigua Escuela de Artes Visuales, calle Funes 1357. Colección Registros Urbanos”. Simón Uriol.
Antiguo edificio de la Escuela Martin A.Malharro sita en Funes 1370. Imagen gentileza Carlos Alberto de Adá

La propuesta hace referencia  al hecho de que la escuela y el artista observan comportamientos similares, al enfrentar diferentes vicisitudes a lo largo de sus trayectorias; donde a  pesar de ello el arte los agigantó y los mantuvo firmes en sus ideales, donde el aprendizaje avanzó desde una búsqueda personal de construcción de estructuras, para luego poder romperlas.
 
Catalogo de la muestra 7 Plásticos Marplatenses año 1977. Un gran artista que estudió en la escuela Martin Malharro en sus origenes. Gentileza de Alejandro Perez Becerra
Primeras promociones en la escuela vieja. Decada del 70. Extraido de la Revista Amasarte año 2005

Alumnas de la Escuela de Artes Visuales Martin Malharro pintando en la Plaza San Martín. Colección Registros Urbanos”. Simón Uriol para Fotos de Familia Diario La Capital

Por un lado, la vida del artista Martín A. Malharro transcurrió en soledad, incomprensión y penurias económicas; luchó contra el medio, batalló contra los demás artistas de su tiempo y reformó la enseñanza artística. Parte de su obra fue un gran aporte a lo que podría llamarse el movimiento impresionista argentino. Su pintura planteó: el problema de la actualidad en el arte, la autenticidad, el impresionismo, la realidad de un arte nacional.
 
Cronología Escuela Martin Malharro
Primeras promociones en la escuela vieja. Decada del 70.Extraido de la Revista Amasarte año 2005
Primeras promociones en la escuela vieja. Decada del 70. Extraido de la Revista Amasarte año 2005

El colegio avanzó con distintos logros: aulas, ampliaciones, más carreras, más alumnos, más docentes, más premios y reconocimientos junto a la recuperación del edificio anexo de la esquina de calle Pampa y Av. Luro; hasta que llegamos a este presente, de una labor ininterrumpida de medio siglo, con un espacio fuertemente consolidado que reconoce en la escuela un importante punto de intercambio entre el individuo y el espacio, donde los egresados exhiben sin tapujos una exquisita formación y una ductilidad profesional que los distingue en el país y en el extranjero.
 
Escuela de Artes Visuales Martin A. Malharro sita en Av. Luro y Pampa
Escuela de Artes Visuales Martin A. Malharro sita en Av. Luro y Pampa


En el año 1960 la escuela fue destruida por un incendio, perdió todas sus instalaciones y elementos de trabajo. Con ayuda de la comunidad se trasladó  al edificio de Funes 1357. En 1964 por falta de pagos fue gestionado el desalojo de la institución, motivo por el cual  los alumnos realizaron una toma pacífica del edificio, con la finalidad de garantizar la continuidad de sus actividades.
 
Talleres de la Escuela de Artes Visuales Martin A. Malharro

En 1965 se procedió a tomar posesión del inmueble junto al director de la escuela, Alberto Torres, tras una ley que dispuso la compra por parte de la Sede de Artes Visuales de la Pcia. de Bs. As. La institución sobresalió por la actividad de sus alumnos que comenzaron a participar en diferentes eventos y concursos, donde desarrollaron actividades artísticas, que fueron reconocidas por diferentes autoridades.

Acceso por calle La Pampa
Facahada de la escuela de Artes Visuales Martín A. Malharro por Av. Luro

En 1993 la institución se trasladó al inmueble ubicado por la calle La Pampa N° 1619, debido a que las instalaciones anteriores se vieron afectadas por un fenómeno meteorológico que destruyó el edificio. Mientras tanto, en 1998, recibió el premio Alfonsina por su trayectoria de 38 años junto a la plástica. Los egresados tuvieron una fuerte presencia, algunos de ellos ganaron becas, premios, concursos y expusieron en diferentes lugares del mundo.
 
Patio de la Escuela de Artes Visuales Martin A. Malharro
Patio de la Escuela de Artes Visuales Martin A. Malharro
Aulas de la Escuela de Artes Visuales Martin A. Malharro
Aulas de la Escuela de Artes Visuales Martin A. Malharro
Aulas de la Escuela de Artes Visuales Martin A. Malharro
Aulas de la Escuela de Artes Visuales Martin A. Malharro

En la actualidad la escuela de artes visuales Marrtin A. Malharro es el referente indicado para el estudio del arte con mayor cantidad de alumnos por año, como así tambien, la de mayor prestigio por su cuerpo docente. Además, la Escuela es reconocida a nivel nacional ya que tiene alumnos no sólo de nuestra ciudad, sino también de la zona, y de otros lugares como La Pampa, Neuquén, Río Negro, Salta, Tucumán, Trenque Lauquen, etc. Encontramos en la Escuela un importante punto de intercambio entre el individuo y el espacio, ya que allí se construyen uno a otro constantemente, siendo este un entorno de suma importancia para nuestra sociedad.

Fuentes:
Torres Alberto Emilio, Decrecencia Cultural, Mar del Plata, Editorial Martín 2003.
Investigación sobre Martín Malharro – Lic. Angel Somma
José A. García Martinez, Centro Editor de América Latina S.A. Junin, 1980
Mapa de sitioNoticiasBlog

1 comentario:

  1. Guauuuu.. Hoy pase x la puerta del colegio ubucado en funes.. Q lamentable verlo tan abandonado.. Gracias la info.. Me gustaria saber mas d ese edificio.. Muchas gracias

    ResponderEliminar